Sin duda hay veces donde lo que más apetece es ver una de esas películas donde no tienes que pensar en exceso, y Cosas que hacer antes de los 18 cumple esto con crece. Si a esto le añadimos a Aubrey Plaza, sabemos que nos echaremos bastantes risas con el film en cuestión.
Mi opinión sobre Cosas que hacer antes de los 18
En este caso nos encontramos a Brandy (Aubrey Plaza), una joven a punto de empezar la universidad y que siempre se ha molestado en cumplir las normas. Después de acabar inesperadamente en una fiesta, se propondrá en convertirse en una especie de «maestra sexual» que pruebe todo lo que pueda, como una especie de trabajo de campo.
De esta forma la chica acostumbrada a hacer listas de todo hará una lista sobre todas las cosas que cree que debe de saber antes de ir a la universidad. La forma de conseguir completar esta lista… Eso ya es otra historia.
Cosas que hacer ante de los 18, o The To Do List, es una historia tremendamente absurda pero que esconde un mensaje bastante claro: la exploración sexual que muchas veces se intenta ignorar en los adolescentes.
Brandy abarca todo este ámbito de la sexualidad de una forma totalmente teórica, con el desconocimiento de alguien a quien nunca se han molestado en explicar qué es un lubricante, y precisamente toda esta historia es para que descubra la importancia del placer propio.
Todo esto lo hace acompañado de un ambiente de lo más propicio. Cosas que hacer antes de los 18 nos traslada al año 93, a pesar de ser una película de 2013, y crea una ambientación de lo más realista.
La forma de comportarse, de informarse y de ver el mundo choca con la manera de actuar actual, y precisamente eso apoya muy bien el mensaje que quiere transmitir la película sobre la importancia de la exploración sexual.
Maravillosa toda la ambientación que tiene Cosas que hacer antes de los 18, que translada de lleno a la década de los 90 tanto a nivel de escenarios como de vestuarios. Todo esto hace que incluso no nos planteemos que estamos realmente ante una película de 2013, y no de los años 90.
Todo esto hace que nos encontremos ante una película bastante peculiar, que no intenta ser más de lo que es y que ofrece un rato de risas asegurado. Es interesante ver cómo se intenta hacer una película adolescente diferente, y se muestra que es posible.
Aquí no vemos muchas de las tonterías ni clichés que sí se muestran en otras películas similares. Cosas que hacer antes de los 18 intenta no caer en todo esto, demostrando que se puede hacer una historia interesante con la que pasar el rato.
Si lo que buscas es una historia que no te haga pensar mucho, que tenga a Aubrey Plaza como protagonista y que te haga reír, además de ver con otra perspectiva ciertos temas, este film es bastante interesante.
Entretiene, no dura mucho y es ideal para una tarde de domingo lluviosa. Las risas con ciertas escenas están más que aseguradas.
