A veces oyes hablar tanto de una serie que sabes que al final va a ser inevitable acabar viéndola. Eso me pasó sin ninguna duda con Dark, serie que siempre me han recomendado por tratar un tema que me apasiona: los viajes espacio temporales.
Y aun así he tardado más de lo que debería en darle una oportunidad a sus tres temporadas y meterme de lleno en una de las series más enrevesadas de seguir de los últimos años. Porque sí: vas a necesitar un mapa para saber qué está pasando y en qué momento del tiempo y del espacio ocurre.
Mi opinión sobre Dark
Dark nos cuenta la historia de un pueblo donde empiezan a ocurrir cosas extrañas tras la desaparición de un joven. Todo parece estar relacionado con una cueva donde hay un agujero espacio temporal capaz de llevarte a otros tiempos, pero poco a poco la serie irá complicándose más para dar peso a los acontecimientos de la historia.
De esta forma da comienzo una serie que juega mucho con las teorías científicas actuales – siempre sin dejar de lado que estamos ante ficción – para contarnos una historia en la que si pestañeas te pierdes por completo y tienes que volver a atrás para enterarte.
Por esa razón, recomiendo ampliamente ver Dark del tirón, sin que haya mucho espacio entre un capítulo y otro. De esta forma es más complicado perderse, porque si dejamos que el tiempo juegue en nuestra contra seguramente después tengamos dudas sobre quién es quién.
Aunque es enrevesada de seguir, Dark nos lleva de la mano para que no nos perdamos y refresquemos qué está pasando. Es así cómo la serie consigue que podamos retomar el hilo aunque, de nuevo, recomiendo verla de golpe.
Dejando esto a un lado, nos encontramos ante una serie que es una delicia ver. La trama, cómo es estéticamente y todo lo que se muestra en ella está cuidado al detalle para hacernos disfrutar de la experiencia de ver una de las series más complicadas de los últimos años.
Por esa razón todavía me da más rabia ver qué ha pasado en la tercera temporada, donde la serie pega un bajón y cuesta el doble de seguir. Aunque sigue manteniendo la intriga, ya no lo hace como en las temporadas anteriores.
Y es una pena, porque a mi personalmente me ha dejado un sentimiento agridulce después de estar terriblemente enganchada a esta serie.
Aun así, sigo recomendando verla y darle una oportunidad. Aunque la tercera temporada flojee, sabe cerrar bien la historia y darnos una explicación plausible ante los hechos que ocurren en el pueblo.
Sin duda, si te gustan los viajes temporales y las rayadas de cabeza, te gustará Dark. Es de esas series que están cuidadas al detalle, que unen todas las piezas poco a poco para que disfrutemos de lo que está pasando.
Nos encontramos ante una especie de Stranger Things pero menos comercial; una serie que sabe marcar sus propias reglas y deja muy claro que, si quieres entenderla, tendrás que meterte de lleno en su juego.
