
Me parece sorprendente cuando encuentras una película de animación que no parece tener excesiva relevancia pero consigue sorprenderte en todos los sentidos. Eso sin duda me ha pasado con El dragón de los deseos.
Me esperaba una película más estilo «meh», y en cambio al verla te encuentras un «wow». Un film de una muy buena calidad con una trama muy bien hilada y que recomiendo ampliamente en todos sus aspectos.
Mi opinión sobre El dragón de los deseos
El dragón de los deseos nos cuenta la historia de un joven que lleva diez años pensando en cómo la vida quiso separarle de su mejor amiga. Mientras él vive en una casa humilde, ella es una famosa rica que ya no pasa nunca por el barrio donde ambos se criaron.
Dispuesto a hacer algo para cambiar este hecho, lo que él no se espera es que por su camino se cruce una tetera mágica donde vive un dragón de los deseos que le concederá en concreto tres.
Pero, mientras el dragón le aconseja que todos sus problemas se solucionarán pidiendo dinero y gloria, él es más de deseos pequeños que le hagan feliz de verdad.
De esta forma El dragón de los deseos se convierte en un film de animación sobre lo verdaderamente importante en la vida, haciendo que sea un film adorablemente tierno de ver.
Eso sin obviar que también tiene su parte de acción, ya que hay gente que va detrás de la tetera mágica para hacerse con un dragón mágico.
El dragón de los deseos es como una especie de Aladdín moderno, y hay muchos detalles que recuerdan a este film pero con su propio toque.
Nos encontramos a unos malos que van detrás de la tetera, es la historia de chico humilde y chica que «lo tiene todo» y, además, la criatura que concede los deseos es la misma que aporta los toques de humor a la historia.
Es normal, por tanto, que al verla tengas cierto dejavu de que lo que estás viendo ya lo has visto anteriormente.
Pero, a pesar de ser similar, El dragón de los deseos sabe destacar para ofrecer algo diferente e inesperado. Se parecen, sí, pero no del todo. El film sabe destacar por sí solo y hacer que merezca la pena darle una oportunidad a esta película.
Apoyada en unos personajes terriblemente tiernos, en especial la relación entre el protagonista y el dragón, el film consigue hacer que no nos despeguemos de la pantalla simplemente por ver cómo acaba.
Como decía, no me esperaba que El dragón de los deseos fuese a ser así. Aun así, me ha gustado que me sorprenda y os recomiendo darle una oportunidad a esta película de animación que no os defraudará.
Una película bien construida con todo lo necesario para entretener a los más pequeños y a los más mayores de la casa. Con un gran mensaje, personajes inolvidables y una trama bien hecha que se apoya en una buena calidad en la animación y en el estilo que tiene.