
Es maravilloso pensar a dónde está llegando el cine de animación español, y Klaus es una muestra perfecta de todo lo que puede conseguirse con tiempo y ganas. Una película navideña que es perfecta tanto visualmente como a nivel narrativo, contando una historia que te deja un buen sabor de boca al terminar.
Crítica de Klaus
Jesper es un niño rico y malcriado que no quiere hacer nada con su vida más que vivir del cuento. Su padre como castigo le hará ir a Smeerensburg, una isla alejada del mundo donde la gente no sabe convivir en paz. El objetivo es claro: abrir una oficina de correos y conseguir enviar 6000 cartas.
¿Cómo conseguir que un pueblo donde la gente no sabe ni escribir decida enviarse cartas? Ahí entrará un leñador huraño llamado Klaus que en su tiempo libre se dedica a hacer juguetes. Sin saberlo, ambos estarán dando paso a una de las leyendas más famosas de la Navidad.
SPA Studio consigue darle la vuelta a la historia que todos conocemos de Santa Claus para contarnos una versión mucho más cercana que sabe conservar la magia de estas películas navideñas pero de una forma muy especial.
Toda la historia de Klaus va tan bien hilada que no parece forzado cómo empieza a surgir Papa Noel. Todo sale de forma natural, haciendo que la historia cobre sentido sin que sea necesario forzarla para conseguirlo.
Todo esto se apoya en un estilo visual precioso que ha llevado años conseguir. Combinando técnicas 2D con 3D, Klaus consigue tener un estilo precioso que hace que te quedes embobado incluso viendo cómo se mueve el aire.
Se nota que detrás de todo esto hay mucho trabajo y mimo para conseguir hacer de esta película de Navidad un pedazo de film que se puede ver casi en cualquier momento del año.
Lo mejor de todo es que Klaus está en Netflix, por lo que es una opción perfecta para ver en Navidad. Una película que hará las delicias tanto de niños como de adultos, consiguiendo una historia de Navidad diferente que es todo un gusto ver.
Es más, conozco a mucha gente que no es muy fan de las películas de Navidad pero que estoy segura que este film les gustará. No sólo han conseguido hacer un buen film navideño, sino que tiene todo lo que hay que tener para estar ante una buena historia independientemente de la época del año en la que nos encontremos.
Admito que Klaus me ha gustado mucho más de lo que pensaba. Es de esas películas que te dejan un poco más contenta una vez las has visto, algo que es todavía más importante cuando hablamos de una película que habla de Papa Noel y la Navidad.
Una historia muy recomendable para ver un día en familia, que sabe captar la esencia de estas fechas pero darle un toque personal y único. Todo un tanto para el cine de animación español, que demuestra una vez más todo lo que es capaz de ofrecer.