Continuamos con las películas para ver en Halloween, y le toca el turno a Nadie saldrá vivo de aquí. Esta película, disponible en Netflix, lo cierto es que en un primer momento no me pareció que tenía mala pinta y, por eso, decidí darle una oportunidad.
¿El problema? Hacía tiempo que no veía una película tan mala. Un film terriblemente aburrido, en el que no ocurre nada y que, de verdad, os recomiendo pasar de largo.
He estado en muchas partes del film a punto de dejarlo a medias, pero lo cierto es que esperaba que mejorase en algún momento. ¿La realidad? No lo ha hecho.
Mi opinión sobre Nadie saldrá vivo de aquí
Nadie saldrá vivo de aquí nos pone en la piel de una joven inmigrante que llega a Estados Unidos después de vivir una trágica situación con su madre. Será entonces cuando encuentre un hostal a buen precio y decida hospedarse ahí.
El problema vendrá cuando la joven empiece a ver cosas tremendamente raras, alucinaciones que la persiguen a todas partes y que no puede quitarse de la cabeza. A esto se le juntarán otros sucesos todavía más extraños como desapariciones y similares.
Será entonces cuando decida marcharse, aunque hacerlo no va a ser tan fácil como se piensa.
Con esta premisa empieza un film que, como digo, es tremendamente aburrido. No tiene chicha, no ofrece nada, y literalmente no asusta. Es un film sin más que no ofrece nada novedoso.
En su contra juega un ritmo tremendamente lento, que hace que sea imposible engancharse a la historia. Da igual lo mucho que lo intentes, porque la forma en la que se narra esta historia no da pie a que puedas entender qué pasa ni por qué.
Hay sustos, momentos fantasmagóricos y se nota que Nadie saldrá vivo de aquí intenta jugar con el terror psicológico para hacer algo diferente. El problema es que no cuaja.
A todo esto se le añade que, llegado un punto de la historia, todo deja de tener sentido por completo. En vez del terror psicológico sencillo, se meten de por medio cosas que dan a entender que estamos ante rituales que no vamos a llegar a entender.
Y, por supuesto, aquí entran efectos especiales de mala calidad. Si ya de por si la película no tiene mucho por donde agarrar, el uso de efectos especiales innecesarios hace que pierda por completo el sentido.
Intentas buscárselo – incluso pensé si me había perdido algún detalle de la película -, pero es que por más que lo intentes no logras encontrarlo. Eso sí, los efectos especiales son tan sin sentido que es entonces cuando prestas más atención a la historia, simplemente buscando entender qué pasa.
Como puede notarse, Nadie saldrá vivo de aquí me ha defraudado por completo. No esperaba mucho de ella, pero tampoco esperaba que fuese como ha resultado ser.
Si estás buscando películas para Halloween, te recomiendo descartarla. No ofrece nada nuevo, va terriblemente lenta y te deja preguntándote qué acabas de ver.
Un film que no entretiene y que no asusta, siendo una película sin más que se olvida fácilmente.
