
Ya desde que la anunciaron me quedé con ganas de ver la temporada 1 de Raised by Wolves. Eso de que Ridley Scott estuviese de por medio lo cierto es que da mucha intriga, sobre todo para los fans de la ciencia ficción como yo.
Aun así, he tardado bastante más de lo que me esperaba en verla pero, una vez hecho, tengo que admitir que no me ha defraudado.
Está claro que es una serie rarísima, de las más raras que he visto dentro de las series de ciencia ficción de los últimos años, pero sin duda tiene algo que engancha y hace que quieras entender qué está pasando.
Mi opinión sobre la temporada 1 de Raised by Wolves
La temporada 1 de Raised by Wolves nos habla de un futuro donde la humanidad está en peligro de extinción. Las disparidades entre humanos han conseguido lo que todos tememos: acabar con el mundo.
Será entonces cuando un ateo mande a dos androides a otro planeta con el objetivo de que críen a doce humanos que puedan convertirse en el futuro de la humanidad, en un pueblo pacífico, sin creencias y capaz de funcionar.
El problema es que el experimento no sale como se esperaba, y de todos los niños que se pensaba que iban a estar en la colonia, solo uno es el que ha sobrevivido.
Tras varios años pacíficos, un arca humana llega también al planeta. ¿El problema? Es un arca mitraica, una religión terrestre que rinde culto al sol.
¿Qué pasa cuando juntas a dos androides ateos con una colonia humana ultrareligiosa? Esa es la primera premisa de toda la serie.
Pero luego va evolucionando conforme avanzan lo capítulos, haciendo que tengamos mucha intriga sobre qué está pasando. Porque parece que ese planeta no está tan deshabitado como todo el mundo se pensaba, y que guarda un oscuro pasado que está a punto de salir a la luz…
Con esta temporada se desarrolla la temporada 1 de Raised by Wolves, y tengo que decir que me ha gustado mucho. Me ha mantenido totalmente intrigada, con ganas de saber qué iba a pasar a continuación.
Aun así, tengo que admitir que conforme avanzan los capítulos la ida de olla es mayor. Llega un punto donde no sabes muy bien qué ha pasado, ya que todo es extremadamente raro, onírico y en apariencia sin sentido.
Y, a pesar de esto, la serie sigue funcionando. Es rara, sabe que es rara y aprovecha su rareza para hacer de ella una virtud. Así que sí, si os la empezáis tenéis que ser muy conscientes de que literalmente estamos ante una serie donde puede pasar cualquier cosa.
Es tan rara que incluso hay momentos donde piensas, «no se ni cómo explicaría este capítulo a alguien sin que suene a que la serie es rarísima».
Pero, si sabes esto y lo aceptas, te encontrarás ante una serie de una muy gran calidad. La temporada 1 de Raised by Wolves ha puesto toda la carne en el asador, y tengo muchas ganas de ver cómo evoluciona toda esta historia.