
Me fascina cómo los tiempos están cambiando y cómo Disney se está adaptando a ellos. Que las películas Pixar como Soul se anuncien ya para su emisión directa en la plataforma Disney + es una muestra de cómo cada vez más películas y series dejarán los medios habituales para publicitar y emitir sus películas.
Y lo cierto es que tanto se ha hablado de Soul que tenía curiosidad por ver si era tan maravillosa como la pintaban, o si se queda a medias. ¿La verdad? Me ha dejado con sentimientos un tanto encontrados al terminarla.
Mi opinión sobre Soul
Soul nos cuenta la historia de Joe, un hombre con un único sueño: triunfar en la música. Cuando muere en un accidente a punto de conseguirlo, hará todo lo posible por escapar y volver a su cuerpo antes de que sea demasiado tarde.
De esta forma acabará en el Más atrás, lo que sucede antes de que vivamos una vida y donde las almas adquieren su personalidad. Aquí conocerá a 22, un alma que no tiene ganas de vivir y prefiere quedarse ahí, y juntos vivirán una aventura que cambiará la perspectiva de ver el mundo de ambos.
Lo cierto es que nos encontramos ante una de las películas más maduras de Pixar, un film que no parece ir tan dirigido al público infantil como sí lo hacen otras de la compañía. Un niño puede disfrutar de la película, pero a veces se pone tan metafísica que está claro que se dirige sobre todo al público adulto y a muchos de los problemas que suelen surgirnos en la madurez.
Porque Soul es una película que, en el fondo, habla del sentido de la vida. Y lo hace de una forma muy tierna que no deja de lado toda su esencia filosófica y consigue dejar un poso al terminar de verla.
He disfrutado de la nueva película de Pixar, por mucho que diga que me ha causado sentimientos encontrados. Lo cierto es que esto ocurre porque me esperaba otra cosa al verla, pero esto no significa que piense que es una mala película.
Supongo que me esperaba una película con un tono más Pixar pero, como digo, es una película muchísimo más filosófica y profunda que las anteriores, que intenta tocar un tema de lo más trascendental.
Y lo cierto es que lo consiguen, haciendo que Soul se convierta en una película muy buena que, aunque tiene «esencia Pixar» es bastante diferente de lo que pueda parecer. Porque toda ella parece sumida en una especie de sueño onírico.
A esto le acompaña un estilo de animación exquisito, que combina muy bien los diferentes «planos que existen» – el habitual de los humanos y ese mundo «astral» al que vamos antes y después de la vida -. Y sin duda me encantan los seres que habitan este mundo y cómo están hechos.
En general, he disfrutado con Soul y estoy segura de que la veré de nuevo para entenderla todavía más. Esto no significa que sienta que es la película de Pixar menos Pixar – o, quizás, la más Pixar de todas -, y que no se parezca a lo que me esperaba.
Hay que ir con la mente abierta para disfrutar por completo del viaje y la experiencia que nos ofrece Soul.