
Hoy me apetecía ver una película de calidad, un clásico de esos que hay que ver en algún momento de nuestra vida. Por esa razón, me puse Todo sobre mi madre de Pedro Almodóvar.
Además, aunque es una película de 1999, está disponible en Netflix. Lo cierto es que es toda una maravilla cómo las plataformas actuales nos combinan películas de actualidad con todas esas películas más clásicas pero que debemos ver en algún momento.
Sin duda, este tipo de plataformas han hecho más sencillo el día a día de cualquier cinéfilo, aunque eso es algo que todo el mundo sabe.
Volviendo al tema que nos implica, ¿Qué tal está Todo sobre mi madre? Lo primero de todo: tengo que admitir que es la primera vez que la veo. Se que es una de esas películas españolas que todo el mundo recomienda ver pero, aun así, no ha sido hasta ahora que me he animado a dar el paso.
Y lo cierto es que Todo sobre mi madre me ha gustado mucho. La historia, la forma en la que se narra y cómo da visibilidad a ciertos temas hacen de esta película española un imprescindible que hay que ver.
Mi opinión sobre Todo sobre mi madre
Tras la muerte de su hijo Esteban, Manuela decidirá volver a Barcelona para reencontrarse con su pasado. A su hijo nunca le contó cómo había sido su vida antes, ni quién fue su padre, pero su inesperada muerte hará que ella vuelva a ese lugar donde todo empezó en busca de dar la noticia.
Lo que no se espera es que, al llegar, acabará quedándose por más de una razón. Y es que Manuela acaba encontrando en Barcelona al dispar grupo de mujeres que acabará convirtiéndose en su familia.
Por un lado está su amiga prostituta que quiere salir de ese mundo. Por otro lado está una actriz reconocida y la que, sin quererlo, inicia que Manuela acabe en Barcelona; Y, por último, nos encontramos a una inocente joven dedicada a ayudar a los demás que está embarazada y con VIH.
Todas ellas forman un grupo de lo más dispar que sirve para dar voces a muchas situaciones que a día de hoy se siguen invisibilizando. Desde el VIH hasta cómo es ser prostituta, o cómo se sienten muchas personas trans, Todo sobre mi madre ayuda a visibilizar a muchos de estos colectivos.
No me extraña que en su momento destacase tanto, y que se haya convertido en una de esas películas que hay que ver en algún momento.
No solo es un peliculón, con grandes actuaciones y un estilo muy bueno, sino que su historia está llena de humanidad.
Vemos una gran dureza desde el principio en Todo sobre mi madre, pero sin duda es un film muy humano, contado con mucho tacto y hecho de tal forma que te hace empatizar por completo con todos sus personajes.
Una historia imprescindible que, a día de hoy, sigue manteniéndose vigente y que no ha perdido nada de fuerza en su mensaje.